Como viene siendo habitual, en Granvertical nos gusta probar los nuevos cacharros que van saliendo al mercado y el Giant de la casa italiana CAMP Safety no iba a ser una excepción. Si te apetece un cambio y quieres sustituir el “conocido descensor amarillo” de siempre por una alternativa bien construida, versátil y eficaz, el Giant puede ser un buen candidato.
Contenido
Ficha técnica
Modelo: Giant
Marca: CAMP Safety
Tipo de dispositivo: Descensor de trabajo y rescate, asegurador, bloqueador, anticaídas
Cuerdas compatibles: EN 1891 A, ∅10,5mm – 11,5 mm; EN 892 simple, ∅9,9-11 mm
Carga max de trabajo: 250 kg
Carga de rotura: 20 kN
Uso con 2 personas: Sí (max. 210 kg)
Antipánico: Sí
Material de fabricación: Aluminio forjado en caliente (cuerpo y plato), acero inoxidable (levas fija y móvil, pestaña apertura platos), plástico (palanca y botón bloqueo de leva)
Peso: 540 g
Certificaciones: CE EN 12841 A-B-C; EN 341/2A; EN 15151-1; ANSI/ASSE Z359.4; EAC
CAMP Safety, un fabricante con solera
CAMP Safety es hoy día una de las marcas que más está apostando por la industria de los trabajos en altura en general y de los verticales en particular; entre sus productos para industria más destacados encontramos el anticaídas Goblin (que ya pudimos probar hace unos años), sus arneses GT o su original bloqueador de pecho Turbochest.
Junto a las marcas Cassin y CAMP, pertenece a la matriz C.A.M.P (Concezione Articoli Montagna Premana), un proyecto que empezó en un pequeño taller de Premana (Italia) allá por el año… ¡1889!
El Giant es el último descensor de una gama que completan los modelos Druid, Druid Pro y el veterano I-Block Evo.
Concepto
El Giant es, a día de hoy, el dispositivo de descenso para trabajos de acceso por cuerda con más certificaciones europeas del mercado. O lo que es lo mismo, con más posibilidades de uso. Además de ser un descensor para trabajos verticales y rescate, el Giant está certificado como dispositivo anticaídas (por ejemplo, durante los pasos de fraccionamientos), bloqueador y asegurador.
Diseño y construcción
Digámoslo directamente: el diseño del Giant es sencillamente espectacular; en mano se siente robusto, compacto y —opinión totalmente subjetiva— ¡el color rojo le sienta fantástico!
Tamaño
Sin duda, lo que más sorprende al tenerlo en la mano es su compacidad. Comparado con un Petzl ID, un ISC D4 o un incluso un Petzl Rig, es mucho menos grueso, gracias principalmente al reducido tamaño de la mecánica de la palanca: colocado en el suelo abulta más o menos la mitad. Su peso es de 540 g, unos 60 g menos que un Petzl ID.
Platos y leva
El Giant se basa, al igual que la mayoría de los modelos de la competencia, en un sistema de platos independientes que se abren sin necesidad de desconectarlo del mosquetón (algo ya estrictamente necesario en cualquier descensor profesional) mediante una pestaña de acero.
Una vez abiertos —éstos no “bailan” ni tienen juego, se nota aquí la calidad de fabricación de la que hablaba antes— accedemos al corazón del aparato, compuesto por una leva móvil de aluminio, una leva fija de acero inoxidable y un botón de plástico que permite bloquear la leva. Este botón resulta especialmente útil, por ejemplo, en trabajos sobre planos inclinados o a la hora de dar cuerda rápidamente a un primero de cuerda durante un chapaje (hablaremos de esto más adelante).
Otra grata sorpresa del diseño del Giant es lo intuitivo que resulta colocar la cuerda en el aparato: el hueco que acoge la cuerda que viene del anclaje es completamente recto mientras que el que acoge la cuerda que va hacia la mano está diseñado en forma de “S”. Esto, sumado al excelente marcaje de sus pictogramas —grandes y claros— dejan poco margen de error a la hora de colocar la cuerda. Buen trabajo aquí de CAMP Safety.
En cuanto al orificio de conexión, su forma ovalada está diseñada para acoger un segundo mosquetón y imposibilitar de esta manera la apertura accidental de los platos.
Colocación de cuerda en el dispositivo © Héctor del Campo
Palanca
La palanca del Giant tiene un diseño muy diferente a lo que estamos acostumbrados: notablemente más fina y algo más corta que la de otros aparatos (CT Sparrow, ISC D4, Petzl ID), está diseñada para ser manipulada con la mano en pronación, es decir, con la palma hacia delante, si bien también es posible activarla con la posición de la mano habitual (supinación).
Cuenta con tres posiciones bien diferenciadas: bloqueo total, descenso y bloqueo parcial/ascenso/aseguramiento. Por la forma del propio descensor, el paso de la palanca de la posición de bloqueo total a la de descenso tiene que hacerse con tres dedos al no haber espacio físico para más, lo que puede resultar algo incómodo al principio si estamos acostumbrados a aparatos que se manejan con toda la mano.
Dicho esto, el control de la carga es tan suave y preciso que sólo requiere una leve presión de la palanca; y ésa es precisamente la principal cualidad de un buen diseño de palanca: que permita encontrar fácilmente el punto exacto en el que nos permita hacer un descenso controlado, lo que en inglés se denomina sweet spot, o punto de equilibrio. Se echa de menos, no obstante, un retorno de palanca automático que ya montan algunos dispositivos como el CT Sparrow o el Petzl ID.
Marcaje
Como viene siendo habitual en CAMP Safety, el marcaje en sus dispositivos mecánicos es extremadamente completo y a la vez muy claro. No me refiero sólo al apartado de las normas técnicas y del marcado CE, sino también a sus pictogramas y demás información relativa al uso del dispositivo.
Así, en el propio dispositivo encontramos información que otros fabricantes reservan exclusivamente para el libro de instrucciones: frecuencia de las revisiones periódicas (aquí 12 meses), información sobre la el uso del botón de bloqueo de leva o recomendaciones sobre riesgos a los que no se debe exponer el aparato (químico, térmico, eléctrico…).
Descenso
Como explicaba más arriba, el punto fuerte de este dispositivo es el control del descenso, y eso a pesar de (¿o quizás gracias a?) una ergonomía de la palanca que requiere un tiempo de adaptación. Probándolo en una tirada de 80 metros (aerogenerador) con cambio gradual del plano horizontal al vertical (buje) funcionó de manera muy fluida: el botón antibloqueo facilita la progresión en horizontal y, una vez en suspensión, la palanca hace su trabajo.
Al igual que el CT Sparrow, el Giant prescinde de la rebaba de rozamiento en el borde del plato (que sí incluyen el Petzl ID, el ISC D4 o el Stec FLow, por ejemplo) y apuesta por una única zona de rozamiento ubicada en el eje de los platos. Esto tiene mucho sentido pues ésa es la posición natural que adopta la cuerda que va hacia la mano y de este modo no hace falta estar peleándose con la cuerda tratando de llevarla hacia la rebaba del plato (los que hayáis usado un ID de la anterior generación sabéis a qué me refiero). Aquí el control de la cuerda sobre el eje de los platos funciona muy bien.
Una vez nos detenemos en un punto concreto del descenso tenemos dos opciones:
- Bloquear la palanca hacia arriba, posición que corresponde a la de bloqueo total.
- Bloquear la palanca hacia abajo (haciendo saltar el antipánico), posición que corresponde a la de bloqueo parcial.
En el primer caso la cuerda queda totalmente bloqueada (el bloqueo es gradual y audible mediante “clics”) y no corre ni en un sentido ni en otro. Ésta es la posición natural de bloqueo si estamos en modo descenso. En el segundo, el bloqueo permite recuperar cuerda en ascenso. La solución es ingeniosa y funciona de manera muy intuitiva, aunque se echa de menos un sistema único de bloqueo en el que no tengamos que preocuparnos si, después de detenernos, vamos a subir o bajar, algo que no siempre es posible anticipar.
En cuanto al antipánico, funciona muy bien y tiene un punto de activación muy logrado. Incluso si eres de los que prefieren la facilidad de uso de los dispositivos sin este mecanismo, el Giant conseguirá que no los eches de menos. Sin duda de lo mejorcito que he probado.
Ascenso
Como explicaba más arriba, el Giant permite recuperar cuerda en dos de las tres posiciones que tiene su palanca: en descenso y en bloqueo parcial/ascenso/aseguramiento), siendo esta última la más recomendable. Si remontamos con la palanca en posición de descenso, ésta bajará automáticamente a la posición de bloqueo parcial, aunque deberemos terminar de bloquearla en esa posición manualmente.
El diseño del Giant elimina la oscilación del aparato sobre el mosquetón cuando sale/entra en carga. © Héctor del Campo
Al igual que el CT Sparrow, el diseño del Giant hace que tanto la cuerda que viene del anclaje como la que sale hacia la mano están ubicadas en la parte superior del mismo y no una en un lateral y otra en la parte superior como ocurre en el ID, en el Rig o en el D4. Como consecuencia, el dispositivo no experimenta ningún movimiento de rotación sobre su eje cuando sale/entra en carga, lo que a su vez se traduce por una menor fricción de la cuerda en posición de ascenso. La diferencia es notable y el resultado aquí es inmejorable.
Aseguramiento a un primero de cuerda
Aquí es donde más destaca el Giant respecto a sus competidores: y no sólo porque el dispositivo italiano es un asegurador por derecho propio (al igual que el ID, el Rig y el Lory, cuenta con certificación EN 15151-1), sino por el diseño del que hablaba en el apartado “Ascenso”: al no existir movimiento de rotación, la cuerda desliza con mucha más fluidez.
Se asegura de manera muy similar a como lo hacemos con un Grigri: damos cuerda al escalador con una mano a la vez que “alimentamos” el aparato con cuerda inactiva con la otra. Si necesitamos dar cuerda rápidamente en un chapaje comprometido, basta con pulsar el mismo botón de bloqueo de leva que sirve para trabajar en planos inclinados. Muy cómodo.
Manipulación de cargas/Rescate
CAMP Safety ha diseñado un descensor capaz de manejar grandes cargas: hasta 210 kg en situaciones de rescate de personas con cuerdas EN 1891A (semiestáticas) de diámetros comprendidos entre 10 y 10,5 mm y hasta 250 kg de carga si utilizamos cuerdas de entre 11 y 11,5 mm.
El buen control del descenso se repite aquí con cargas elevadas. Probado con dos personas, la palanca permite dosificar bien el descenso prescindiendo de un mosquetón de frenado adicional, algo que podemos hacer siempre y cuando la carga no supere los 140 kg.
A favor | En contra |
Control del descenso Fluidez de ascenso insuperable Calidad de fabricación Sistema antipánico equilibrado El mejor descensor/asegurador del mercado |
¿Tamaño de la palanca? |
Granvertical agradece la cesión de este producto a Barrabés Pro, tienda especializada en material para trabajos verticales, industria, rescate y bomberos. Además de producto ofrecen servicios como financiación a medida, revisión de EPI y permiten devolución gratuita en cualquiera de sus tiendas. Podéis echarle un vistazo al Giant aquí
4 respuestas a «Review: CAMP Safety Giant»
Muchas gracias por tu artículo.
Como siempre muy interesante y formativo
Hector, gracias por compartir…
Excelente reseña, muchas gracias Hector
Critica muy interesante y objetiva.. gracias por tu trabajo