Tener que realizar un autorrescate en trabajos verticales es una posibilidad que, aunque remota, debe anticiparse y planificarse correctamente en todas las situaciones. Descender o elevar a un compañero, superar obstáculos como nudos o fraccionamientos o realizar un cambio de cuerda son sólo algunas de las maniobras que todo técnico debería conocer. Ahí van algunas de las técnicas más utilizadas a día de hoy.
Contenido
- 1 ¿Hacia arriba o hacia abajo?
- 2 Técnicas de desbloqueo
- 3 ¿Descenso con o sin obstáculos?
- 4 ¿Rescate por las mismas cuerdas o por cuerdas adicionales?
- 5 Condiciones de las maniobras
- 6 Cinco rescates para cinco situaciones
- 6.1 ➔ Rescate nº1: víctima inconsciente suspendida de descensor. Descenso sin obstáculos
- 6.2 ➔ Rescate nº2 víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Descenso sin obstáculos
- 6.3 ➔ Rescate nº3: víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Cambio de cuerda
- 6.4 ➔ Rescate nº4: víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Paso de fraccionamiento
- 6.5 ➔ Rescate nº5: víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Paso de nudo
¿Hacia arriba o hacia abajo?
Cuando hablamos de técnicas de autorrescate en trabajos verticales diferenciamos dos grandes bloques:
- Descender a la víctima
- Elevar a la víctima
En este artículo vamos a repasar paso a paso maniobras de evacuación por descenso exclusivamente. En un futuro artículo abordaremos las maniobras de evacuación por ascenso.
He elegido cinco escenarios que requieren la aplicación de cinco técnicas diferentes. Existen numerosas variantes y situaciones distintas de las abordadas, por ello os animo a que practiquéis y entrenéis “en casa”.
Estas maniobras suelen enseñarse en las acciones formativas impartidas por asociaciones privadas como ANETVA o IRATA, pero quiero aclarar que no es el propósito de este artículo describirlas siguiendo estrictamente sus recomendaciones, o lo que es lo mismo, no pretende servir de guía de apoyo a las citadas acciones formativas. Si tu intención es aprender las maniobras enseñadas por IRATA o ANETVA ¡sólo te puedo recomendar que hagas los cursos!
Aclarar también que estas técnicas no son las únicas eficientes y seguras para solventar los escenarios que se repasan a continuación, sólo un compendio de las que yo utilizo de forma habitual en simulacros y entrenamientos.
Al lío. La primera opción a valorar a la hora de planificar un rescate será el descenso de la víctima. Elevar a la víctima es una opción perfectamente viable si se ha planificado correctamente, pero siendo mucho más sencillo descenderla que elevarla daremos siempre prioridad a la primera posibilidad.
La principal dificultad de una maniobra de rescate de un trabajador suspendido de una cuerda es desengancharlo de esa cuerda y pasarlo a un sistema alternativo de descenso. En trabajos verticales nos podemos encontrar con dos situaciones claramente diferenciadas:
- Trabajador suspendido de su descensor
- Trabajador suspendido de bloqueadores/anticaídas/elemento de amarre
En el primer caso el desbloqueo es muy sencillo, pues bastará con activar la palanca del descensor para transferir el peso de un sistema (su cuerda) a otro (por ejemplo, la cuerda del rescatador). Hablamos aquí de un sistema “desembragable”.
En el segundo caso, los dispositivos no son desembragables por lo que nos veremos obligados a elevar al rescatado para poder desbloquearlos.
Técnicas de desbloqueo
Existen diversas técnicas para desbloquear a una persona suspendida de dispositivos no desembragables, aunque en este artículo nombraremos tres:
1. Desbloqueo por contrapeso
El más versátil. De nuevo aquí existen diversas técnicas, aunque quizá la más extendida sea la de contrapeso con ayuda de un estribo o pedal. La maniobra consiste básicamente en colocar el mosquetón del pedal en la anilla esternal o ventral de la víctima (según si está suspendido de croll/anticaídas o del cabo de anclaje de posicionamiento), pasar el pedal por el mosquetón de un bloqueador colocado en la cuerda de la que cuelga la víctima, subirse al estribo de manera que todo nuestro peso esté sobre él y tirar de la víctima hacia arriba cogiéndole debajo de la anilla ventral. Con elevarlo tres dedos es más que suficiente para desbloquearlo de un croll/anticaídas/cabo de anclaje. Entre las ventajas de este sistema está que es posible usarlo en todas las situaciones (independientemente de donde se encuentre situada la víctima).
2. Desbloqueo mediante polipasto
Interesante en determinadas situaciones. Si, por ejemplo, existe mucha diferencia de peso entre víctima y rescatador, instalar un polipasto puede facilitar la maniobra. Se puede montar directamente en la cuerda de la víctima (muy rápido y sencillo si disponemos de un dispositivo tipo Jag de Petzl) o simplemente en la propia cuerda del rescatador. En este caso bastará con conectar nuestro cabo corto a la anilla esternal de la víctima, colocar un bloqueador de mano en nuestra cuerda y reenviar la cuerda que sale de nuestro descensor mediante una polea. De esta forma, a medida que vayamos ganando altura, iremos elevando a la víctima hasta que quede totalmente suspendida de nosotros y podamos desbloquearla. Este sistema tiene varios inconvenientes, siendo el principal que no funciona si la víctima se encuentra pegada a la cabecera (por ejemplo pegada al nudo en el interior de una nave industrial) o recién colgado en una fachada a escasos centímetros del cambio de ángulo de horizontal a vertical de la cuerda: sencillamente no hay espacio.
3. Desbloqueo mediante corte de cuerda
Aparte de ser expresamente desaconsejado por la norma EN 363, el corte de cuerda en situaciones de rescate debería constituir siempre la última opción. No cabe duda de que puede ser una opción muy rápida e incluso segura si se planifica correctamente, pero en una situación de nervios puede resultar peligroso. En otras muchas situaciones, simplemente no es posible cortar ninguna cuerda pues la necesitamos para hacer la evacuación. Y si sólo sabemos hacer rescates con corte de cuerda alegando que es la solución más rápida, ¿qué cara se nos quedaría si se nos cayera la navajita en plena operación? Lo has adivinado: cara de tonto.
¿Descenso con o sin obstáculos?
Una vez desbloqueada la víctima nos podemos encontrar con dos situaciones claramente diferenciadas:
- Descenso sin obstáculos: el descenso se realiza desde el punto de desbloqueo de la víctima hasta el suelo directamente.
- Descenso con obstáculos: rescatado y rescatador deben sortear algún obstáculo antes de poder alcanzar el suelo: fraccionamientos, desvíos, cambios de cuerda, nudos, etc.
Lo ideal sería siempre hacer un descenso sin obstáculos, pero esto no siempre es posible. Por ejemplo, si la víctima se encuentra trabajando en una zona en la que resulta imposible bajar al suelo (porque hay agua, o por la presencia de alguna máquina de una fábrica que no es posible detener) no quedará más remedio que cambiarse a otras cuerdas o superar un fraccionamiento o un desvío en caso de que se haya optado por estas opciones para poder descender a una zona segura.
¿Rescate por las mismas cuerdas o por cuerdas adicionales?
De nuevo aquí, lo ideal sería hacer un rescate por cuerdas distintas a las del herido, aunque no siempre es posible. Correctamente planificado el autorrescate de una víctima puede realizarse por las mismas cuerdas de la víctima. Por supuesto, siempre deberíamos contar con un plan b por si una de las cuerdas de la víctima resultara dañada.
Condiciones de las maniobras
➔ En este artículo todos los rescates se realizan sobre las mismas cuerdas
➔ El acceso a la víctima se hace siempre desde arriba, colocando el descensor en la cuerda del anticaídas del accidentado y nuestro anticaídas en la cuerda de su descensor. Los casos en los que haya que acceder desde abajo complican ligeramente la maniobra ya que el rescatador debe posicionar su anticaídas por encima de la víctima como si de un paso de nudo se tratara antes de iniciar el rescate propiamente dicho.
➔ Se ha elegido la técnica de desbloqueo por contrapeso con estribo para todos los escenarios
➔ El mosquetón del descensor del rescatador irá conectado a la anilla ventral de manera que el gatillo quede mirando haciendo dentro y la abertura quede hacia abajo (en el siguiente punto se explica el porqué)
➔ Como conexión entre víctima y rescatador usaremos uno o dos mosquetones (o una cinta exprés con mosquetones de seguridad) que conectarán su anilla esternal con el mosquetón de nuestro descensor
Son varias las ventajas de este sistema frente al uso del cabo corto: por un lado la víctima cuelga mucho más cerca de nosotros —lo que nos permite asistirla en caso necesario— También nos permite salirnos del sistema en caso de necesidad dejando colgando a la víctima en las cuerdas, algo muy complicado de hacer cuando ésta cuelga directamente de nuetro cabo corto. Por último permite que, una vez llegados al suelo, podamos, gracias a la posición del conector de nuestro descensor descrita en el punto anterior, soltarnos del descensor dejando colgada a la víctima de él
Esto nos permite colocarla en posición sentada con las piernas dobladas si está consciente o en posición lateral de seguridad (PLS) si está inconsciente (más información en este artículo de Jon Redondo) ya que el rescatador llega al suelo antes que la víctima, algo muy importante si queremos evitar las consecuencias derivadas de lo que se conoce como “muerte del rescate”
➔ A esta conexión corta añadiremos una segunda conexión (conexión larga), ya que al efectuar el recate sobre las mismas cuerdas de la víctima ésta necesita un segundo punto de conexión con el sistema de seguridad. Haremos esta conexión larga con nuestro cabo largo, que conectaremos en la anilla esternal de la víctima[/su_box]
Cinco rescates para cinco situaciones
A continuación vamos a repasar paso a paso cinco maniobras de rescate con las que nos podemos encontrar en caso de emergencia. Todas ellas forman parte de los niveles 1, 2 y 3 del programa formativo de asociaciones como IRATA, ANETVA o FISAT, por citar sólo algunas.
➔ Rescate nº1: víctima inconsciente suspendida de descensor. Descenso sin obstáculos
Es la situación más sencilla de resolver y a la vez la más probable pues en la mayoría de los casos nos encontramos trabajando suspendidos del descensor
1. Acercarnos a la víctima por la cuerda de su anticaídas hasta situarnos ligeramente por encima de él. No seguiremos bajando para evitar que su anticaídas quede en posición desfavorable (por debajo de su anilla esternal, en caso de no lo estuviera).
2. Conectar nuestro cabo largo a su anilla esternal y bajar ligeramente hasta que el mosquetón de nuestro descensor se encuentre a la altura de la anilla esternal de su arnés.
3. Utilizando uno o dos mosquetones, conectar su anilla esternal al mosquetón de nuestro descensor.
4. Activar la palanca del descensor de la víctima hasta que quede totalmente suspendida de nosotros. Es importante procurar que las cuerdas no queden atrapadas entre víctima y rescatador y que los mosquetones de la conexión corta trabajen correctamente (eje longitudinal).
5. Sacar la cuerda de su descensor y comprobar que nuestro anticaídas no está bloqueado.
6. En caso necesario –depende de cada fabricante- añadir un mosquetón de frenado adicional en una de las anillas laterales de nuestro arnés, pasar la cuerda inactiva de nuestro descensor y descender hasta el suelo.
Puedes ver un una aplicación práctica aquí
Y otra con tercera cuerda aquí
➔ Rescate nº2 víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Descenso sin obstáculos
1. Repetir los pasos 1-3 del escenario nº1.
2. Colocar un bloqueador (normalmente nuestro “puño” o el de la víctima) en la cuerda de la que está suspendida la víctima y conectar el mosquetón del pedal en su anilla esternal.
3. Pasar el pedal por un mosquetón conectado en el agujero superior del puño –con ello ganamos unos valiosos centímetros– y subirse al estribo de manera que todo nuestro peso esté sobre él.
Es importante no colocar el puño demasiado alto, ya que después nos costará recuperarlo
La altura del estribo es crítica para que la maniobra de desbloqueo se haga cómodamente. Si lo colocamos más abajo, la víctima se nos quedará muy alta y nos costará elevarla.
Si lo colocamos muy arriba, los mosquetones que nos conectan a la víctima (ver punto nº2) nos impedirán ponernos de pie ya que la conexión no será suficientemente larga. Una buena referencia es que una vez cargado todo nuestro peso sobre él, el pie se nos quede justo por debajo del culo de la víctima.
4. Agarrados con una mano a la cuerda de la víctima, cogeremos su arnés por debajo de la anilla ventral con la otra mano y tiraremos hacia arriba de modo que elevemos a la víctima tres o cuatro dedos, lo suficiente para que el bloqueador de pecho pierda tensión. Abrimos el bloqueador, sacamos la cuerda y volvemos a cerrarlo.
5. Cogemos los dos segmentos del estribo con una mano y sacamos el pie del estribo. Soltamos lentamente el estribo hasta que la víctima quede totalmente suspendida de nosotros.
NOTA: Destacar que la transferencia directa de la víctima sobre el rescatador con esta técnica no es factible si ésta se encuentra lejos de la cabecera (20 metros o más).
En efecto, debido a que el “chicle” de la cuerda de la víctima será de entre el 3 y el 5% de la longitud de cuerda que haya entre ella y la cabecera —según norma EN 1891 A, cuerdas de bajo coeficiente de alargamiento—, al soltar el peso del estribo es muy probable que el puño colocado en la cuerda de la víctima se nos quede fuera de alcance y dificulte el control del estribo, ya que ésta tenderá a “subir” a medida que se vaya transfiriendo el peso a las cuerdas del rescatador.
Por ello, en estos casos añadiremos un paso más a la secuencia: colocaremos el descensor de la víctima en su anilla ventral y transferiremos su peso de su bloqueador de pecho a este descensor y no a nosotros directamente.
De este modo, una vez colgado de su descensor, podremos transferir su peso a nuestras cuerdas activando simplemente la palanca.
6. Descender hasta el suelo (añadir mosquetón de frenado si necesario).
➔ Rescate nº3: víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Cambio de cuerda
1. Repetir los pasos 1-5 del escenario nº 2.
2. Conectar un segundo descensor (el de la víctima) a nuestra anilla ventral de modo que también coja el mosquetón de la conexión corta y pasarle la cuerda a la que queremos cambiarnos. Tensamos ligeramente esta cuerda a mano.
3. Conectar el anticaídas de la víctima a nuestra anilla esternal y pasarle la cuarta cuerda.
4. Activamos el primer descensor para iniciar la transferencia de una cuerda a otra hasta quedarnos suspendidos totalmente del segundo sistema.
5. Soltar las cuerdas del descensor y anticaídas de las cuerdas de arranque y continuar con el descenso.
➔ Rescate nº4: víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Paso de fraccionamiento
1. Repetir los pasos 1-5 del escenario nº 2. Es fundamental que tanto la conexión corta como la larga entre víctima y rescatador no queden situadas en el lado cóncavo (o interior) que forma la comba del fraccionamiento, sino en el lado convexo (o exterior). De lo contrario podríamos quedarnos atrapados en la propia comba, al quedar la víctima a un lado y el rescatador al otro.
2. Descender hasta que nuestro descensor se sitúe a la altura del nudo del fraccionamiento.
3. Conectar un segundo descensor (el de la víctima) a nuestra anilla ventral de modo que también coja el mosquetón de la conexión corta y pasarle la cuerda a la que queremos cambiarnos, (la que sale del fraccionamiento y va al suelo). Tensamos ligeramente esta cuerda a mano.
4. Activamos el primer descensor para iniciar la transferencia de una cuerda a otra hasta que ambas cuerdas tengan más o menos la misma tensión.
5. En este momento estaremos conectados a tres cuerdas, por lo que aprovecharemos para cambiar el anticaídas de la cuerda que sale del fraccionamiento hacia arriba a la cuerda que sale del fraccionamiento hacia abajo.
6. Terminamos la transferencia activando el primer descensor hasta quedarnos totalmente suspendidos del segundo descensor.
7. Soltar la cuerda del primer descensor y continuar con el descenso.
➔ Rescate nº5: víctima inconsciente suspendida de bloqueador de pecho. Paso de nudo
1. Repetir los pasos 1-5 del escenario nº 2.
2. Detenerse cuando el nudo se encuentre 1 metro por debajo de nuestro descensor.
3. Hacer un nudo mariposa en la cuerda del descensor, por debajo del nudo que queremos saltar y tan pegado a éste como sea posible.
4. Conectar este último nudo a la cuerda de suspensión por encima de nosotros mediante un bloqueador (por ejemplo un puño) de manera que se forme una comba. El nudo mariposa debe quedar a la misma altura que nuestro descensor.
5. Colocar el descensor de la víctima en nuestra anilla ventral y conectarlo al tramo de cuerda que sale de la comba y va hasta el suelo. Tensarlo a mano todo lo que se pueda.
6. Activar el primer descensor para transferir el peso al segundo descensor.
7. Retirar el primer descensor y seguir bajando.
Y ahora… ¡a entrenar!
33 respuestas a «Autorrescate en trabajos verticales: 5 maniobras de descenso»
Hola Leonardo,
Los dispositivos de descenso por fricción no restan resistencia a la cuerda, al contrario de los nudos.
Un saludo.
Tengo una pregunta ,el descendedor tipo 8 le resta resistencia a la cuerda
Gracias a ti Nancy, un saludo!
Saludos desde colombia,esta pagina super bien explicada, muchas gracias
Excelente todas las publicaciones qué haces De gran ayuda Grande aprendizajes en este gran mundo hermoso de las cuerdas muchas gracias héctor por Toda esa gran información que nos suministras a todos nosotros
Material maganifico… Parabéns
Hola Andrés,
Me alegro de que te guste el blog, gracias 🙂
Respecto al modo de realizar las maniobras que comentas, no existen normas o legislación que lo regule, sino que son las propias asociaciones profesionales como IRATA, ANETVA y similares quienes definen más o menos cómo realizar las maniobras. Y digo «más o menos» por que mientras ANETVA por ejemplo especifica claramente en su manual cómo debe ejecutarse cada maniobra (paso a paso), IRATA en cambio sólo da unas directrices (unas líneas rojas, como por ejemplo no quedarse colgado de una cuerda, no mover el bloqueador de pecho por la cuerda si el bloqueador de mano está desconectado, mantener el anticaídas en factor de caída relativo 1 o inferior, etc) pero es flexible en cuanto al método elegido para ejecutar las maniobras y permite diferentes técnicas.
Un saludo y gracias por participar.
Gracias Carolina, es un placer compartir 🙂
Un saludo.
Hola Hector, felicitaros por el gran trabajo que hacéis. Tengo unas dudas a ver si me las puedes aclarar, para pasar un nudo, que normas o directrices tengo que cumplir, por ejemplo, para quitarme un dispositivo de subida para subirlo por encima del nudo, previamente tendré que conectarme…. no entiendo porque puedo pasar mi puño directamente por encima del nudo (no lo se seguro si esta bien hecho así) y para pasar mi croll necesito otro punto de anclaje o otro dispositivo como podría ser un ID, otras opciones seria conectarme al nudo con un cabo de anclaje, etc., pero, donde están o que normas deberíamos cumplir para realizar un cambio de cuerdas o pasar un nudo, con la máxima seguridad, No se si me he explicado bien. Un saludo.
Muy bueno !!
gracias por compartir tus conocimientos.
super la informacion de gran aporte
excelente, quisiera saber si tienes algún rescate con tirolesa , gracias
Gracias Jorge 🙂
Un saludo.
Muy buen blog Héctor saludos desde Colombia.
El tema es muy interesante,lo que hace falta es no tenerlo que aplicar
EXCELENTE TEMA SERVIRÁ DE AYUDA Y APOYO A MIS COMPAÑEROS DEL GRUPO DE RESCATISTA, GRACIAS MIL SIGAN ADELANTE
HECTOR MUY BUENO TU BLOCK SALUFOS DESDE BOLIVIA
Hola Héctor soy Roberto Padua Soy Especialista en Búsqueda y Rescate e instructor tu blok es muy bueno
Hola hector soy paramedico y me gustaria conocer mas sobre rescate con cuerdas
Hola Roberto, me alegro de que te guste el blog, muchas gracias.
Tanto el ID (S y L) como el Stop cumplen con la norma EN 341 A sobre dispositivos de rescate, por lo que son perfectamente adecuados para ser utilizados en sistemas desembragables en previsión de un rescate.
Personalmente prefiero el ID ya que además de contar con sistema antipánico (nunca viene mal), no requieren llave de bloqueo y funcionan bastante mejor en sistemas de izado si necesitamos revertir el sistema.
Un saludo y gracias por comentar!
Hola Hector, me.llamo.roberto y soy bombero, sigo.mucho tu blog, y la verdad me quito el sombrero, felicidades,.
Me gustaría hacerte una pregunta, en laa cabezas desembragble utilizarìa un descendor stop, o mejor un desendedor I’DS o L, con sistema antipànico. Me gustarìa coner tu opiniòn, ya que yo personalmente prefiero el I’D, el stop es para espeleosocorro y desliza las polea y no tiene siste antipànico.
Saludos
Es un placer, gracias Joaquín.
Muchas gracias a ti Juan Carlos! Un saludo.
Gracias Hector, tus aportes son altamente valiosos, muy precisos y oportunos para nuestro fortalecimiento empresarial.
Excelentes recomendaciones gracias por todo
Muy importante saber este tipo rescate ya que yo tube un rescate como brigadistas esta Semana.. Lo que les sujiero es que amplien con videos o un curso presencial gracias.
Excelente trabajo. si pudieras subir videos te lo agradeceríamos mucho.
Gostei muito da mensagem…
Me encantó loco
Fantastica Info, Saludos desde medellin Colombia!!
Muy bueno como siempre
eres una maquina.
UN FUERTE ABRAZO.
Buen trabajo Héctor!!!